¡Las fiestas de la humanidad!

¡Hola de nuevo! Tranquilos, no vengo a hablarles otra vez sobre el Heavy Metal y el Rock, y menos sobre lo de Blind Guardian... o al menos eso espero. Ya tendré mucho que escribir después del "gran día". Quería comentar sobre algo que ayer me puso a pensar un poco: las festividades religiosas, y la juventud.

Pues verán, aquí en Venezuela se celebra y se hace fiesta por casi todo, en especial celebraciones religiosas como los de un Santo o una Virgen, eso no es algo nuevo; sin embargo, honestamente nunca había ido o asistido a un evento de esos porque simplemente no es algo que disfrute o que sienta la necesidad de estar ahí, además, no soy muy devoto que digamos... ¿pero qué cosas digo? No soy nada devoto o creyente, y los que me conocen saben que es así.

Resulta que ayer me invitaron a las fiestas de la Virgen del Valle en una ciudad vecina. Sin tomar en cuenta el pequeño detalle del engaño que sufrí con las supuestas horas de salida y llegada, me puso a pensar un poco en la humanidad.

Virgen del Valle.

Lo dije desde un principio, este tipo de fiestas no es algo que disfrute, y no por la música precisamente, sino porque uno ve de todo y lo que siente es... no se como se llamaría, ¿pérdida de fe en la humanidad? En serio, no podría contar cuantos chicos y chicas jóvenes, muy jóvenes, estaban en el lugar bebiendo, bailando como si fueran animales en celo... y demás cosas. Me puso a pensar en la infancia que tuve, claro, eran otros tiempos, ¡pero caraj*! Era algo sano. Tampoco estoy tan viejo... es decir, no soy un señor de 50 años quien pensaba en el estilo de vida adolescente de hace medio siglo, ¡si apenas tengo 23 años! Pero, en mis tiempos los chicos de 10, 11 y 12 años hacíamos cosas más sanas: nos la pasábamos jugando videojuegos con nuestros amigos, jugábamos a cualquier deporte, salíamos a correr, visitábamos la familia, entre otras cosas. En cambio ahora...

No es para extrañarse el ver cosas como esta.

 

El alcohol era algo que desconocíamos (¡menos mal!), y teníamos cierta "inocencia" y sentido de seguridad de la cual me siento orgulloso que tiviéramos... pero ahora, los chicos y chicas de esa edad andan enborrachándose más que, las chicas viven tomándose fotos con poses y vestimentas que harían envidiar a las prostitutas más prestigiosas del mundo... y obviamente lo publican en sitios web donde los demás pueden comentar, admirarlas o tomar datos para planear un secuestro (no, lo último no fue broma); bailan cierta "música", que ni diré el nombre, con un estilo que te hace pensar que estás viendo una película porno con los actores vestidos, etc.

 

¡Esos son los bailes de mi pueblo, caraaacha!

Algo quizás más característico de esta juventud de hoy en día es que tienen menos tiempo para la familia, de hecho, en algunos casos se olvidan que la tienen, y sólo se la pasan con sus amigos... aunque en muchos casos es perfectamente justificable, pero aún así es algo triste. Y lo peor es cuando se trata de niños, ¿o díganme qué pensarían si sus hijos o hijas estuvieran así?

Un padre de mentalidad porno se sentiría orgulloso de su hijo si estuviera "perreando" así

Quizás no debería hablar de esas cosas como si yo fuera un modelo ejemplar, después de eso, a partir de los 15 años aproximadamente comencé a corromperme y era prácticamente parecido a ellos, pero claro, al menos en mi caso, mantuve cierto nivel de conducta y no me prostituí como suele hacer la mayoría hoy en día. El hecho es que la juventud está desviándose mucho del buen camino, y no es de extrañarse, después de todo, la televisión, el intenet y algunas personas quienes se pueden convertir en sus amistades están llenas de mierd*, y me disculpan la expresión. Por eso existen cosas como esta:

Reggaetón Niños: The REAL Flow!

Así que, regresando al tema principal que comentaba al inicio, ¿quién dijo que celebrar "el día de la Virgen" es sinónimo de alcohol y sexo? ¿Acaso creen que "la Virgen" estaría feliz de ver a tanta gente emborrachándose? Si yo fuera un santo y en mi nombre hicieran cosas como esas, bajaría y les daría palo a todos. Vayan a la iglesia, recen, pídanle salud y mucha felicidad a su imagen divina... no sean hipócritas, eso si es una ocasión apropiada para celebrar. Claro, yo por mi parte no pienso que se deba celebrar nada por una imagen que alguien vió hace 2000 años y a la que quisieron atribuirle el "mérito" a la divinidad... pero bueno, así es el mundo, así es la tradición, y la respeto... lo que no comparto es la forma de celebrar, pero bueno, no puedo hacer nada más que quejarme al recordar frases animadoras como: "Mientras viene la próxima agrupación musical, ¡le regalamos a la Virgencita un reggaetón para que disfrute su cumpleaños!" O sea, wtf?

Oh, ¡qué buen regalo para una Virgencita! Debe estar muy orgullosa.

Cuando pienso en cosas como estas, y escribo todo lo que escribí como ahora, es cuando me siento orgulloso de mi madre y la educación fuerte que me dió... y al mismo tiempo me hace preocuparme por el futuro. Lo cual me hizo recordar algo que no mencioné antes, y que de hecho, son los principales culpables de prácticamente todo lo que escribí arriba: los padres y su forma de educar. Si un padre sabe bien cómo educar a sus hijos, será muy difícil que otras influencias cambien su forma de pensar, al menos sus valores y principios.

Esta entrada se la dedico a Voltdergate, quien suele escribir cosas como esta pero con más dedicación en su blog Midnight At The Pink Flamingo Club. Muy buen lugar para leer casos "de la vida real". (Espero que no pienses que te asalté la idea por hacer este tipo de entradas. xD)

He aquí el futuro de esos niños.