Si
existe en este mundo un tema con el cual soy extremadamente crítico
y duro, es con el de la discriminación. Antes de
continuar, veamos lo que nos dice el diccionario de la Real Academia
Española sobre la discriminación:
Discriminar (del lat. Discrimināre):
Como
la discriminación es un tema extremadamente amplio, voy a centrarme de manera casi exclusiva en la discriminación por diferencias políticas en Venezuela; esto
es algo que se ve día a día y de manera creciente, y cada vez es
más preocupante ya que cada
día que transcurre, la situación parece
volverse mucho
peor. Algo
que muchos creen, afirman, y/o
están completamente seguros, es
que todo esto comenzó
hace 14 años, pero, ¿realmente fue así? Hace
poco tiempo opiné lo
siguiente en el blog de un
amigo con respecto a la
división entre las dos preferencias políticas más poderosas
de nuestro país:
“Siempre ha existido diferencias de clases, grupos o bandos. Siempre existirá un bando que se crea superior a otro, que se sienta "la raza superior"... y esto genera automáticamente que siempre exista un grupo que quiera atacar o defenderse de estos. Eso que digo es algo más que obvio, todo el mundo lo sabe, pero personalmente pienso que ese es el factor más importante de todos en cuanto a nuestra división se refiere... y la verdad, no creo que en 14 años se hubiera podido eliminar algo que viene desde hace siglos. (...) Los 'poderosos' siempre considerarán a los débiles 'arrastrados', 'flojos', 'mantenidos' y 'marginales'.”
Todos somos iguales, pero muchos se empeñan en querer hacernos vivir como si fuéramos diferentes.
Eso
que mencioné arriba es algo que se puede ver, sentir y apreciar
todos los días del mundo. No ha existido un día del año en el cual
no escuche, vea o lea muestras gratuitas de odio, discriminación e
intolerancia por diferencias políticas. Es como si el simple hecho
de que otra persona piense diferente genere un rechazo automático,
olvidándonos que todos somos habitantes de un mismo país, o mejor
dicho, olvidándonos que todos somos venezolanos.
Eso es algo que me da mucha tristeza, rabia e impotencia, ya que me
pone a pensar muchísimo en nuestro futuro.
Algo
que hace esta situación peor de lo que parece, es que las personas
que discriminan están completamente seguras que tienen la verdad
absoluta de su parte, y que todo lo que piensen los demás está mal.
Por lo general caen en el fatal error de no ser capaces de ponerse en
el lugar de esas personas a las que atacan, es decir, a esos que ven
como si fueran seres inferiores (simplemente por no pensar como
ellos) y tratar de comprender sus puntos de vista, o buscar comprender el motivo de su manera de pensar, ser o vivir.
Lo
peor es que este es un problema cultural, y que sigue siendo
alimentado constantemente sin parar, especialmente por los medios de
comunicación, ya sea radio, televisión, prensa, Internet, etc., ademas de la carencia de una buena educación en casa. En
la gran mayoría de los comerciales, propagandas, series, novelas,
películas y demás contenidos con los cuales somos bombardeados a
diario se puede ver eso que menciono: mensajes que inducen al
racismo, a la homofobia, al sexismo, a los prejuicios,
al odio, a la violencia, a la intolerancia, etc. Esta situación empeora cuando, en el
caso de niños, no hay personas que sean capaces de enseñarles valores que sirvan para combatir los anti-valores que
estos reciben por medio de ese tipo de contenidos (a esto me refería con la educación en casa).
Qué hermoso sería que todas las personas en este país pensaran así.
Algo
que siempre he querido o deseado hacer en esta vida, es poder acabar
con esas diferencias entre nuestra gente... pero es algo que
considero completamente imposible. Muchos me llaman pesimista por
pensar así, y la verdad puede que tengan razón, pero tampoco puedan
negar que es una fantasía creer que algo que viene desde
prácticamente el origen de la humanidad, y que jamás se ha detenido su difusión, se acabe tan fácilmente por los
buenos deseos o acciones de una sola persona, o de varias. Se
necesitan años, décadas, siglos para poder
acabar con esas barreras sociales y todos esos anti-valores que nos
dividen... y no solo se necesita tiempo, se necesita reestructurar
por completo muchísimas cosas, principalmente la educación moral y
las enseñanzas éticas, y eso, es algo que sólo podemos comenzar a
hacer nosotros con nuestros hijos, familiares, amigos, conocidos, y
sí, también los desconocidos.
Uno
de los métodos que considero que es el más efectivo para dar inicio
con esta reestructuración de la sociedad es, como mencioné arriba,
la educación moral y las enseñanzas éticas. Si no se le
enseña a las personas a tolerar, a respetar, a aceptar a
los demás, a convivir a pesar de las diferencias, y quizás lo más
importante: a darse cuenta que no siempre tienen la
razón, la situación nunca cambiará, y las cosas seguirán
iguales por siempre... e incluso podrían empeorar y
culminar en una situación catastrófica que a nadie le gustaría
vivir; sí, me refiero a una guerra civil, o
siendo menos extremista, a un estado de intolerancia e irrespeto
absoluto.
Hacer
eso no es nada fácil, de hecho, considero imposible que todos se
unan para lograr esto... y eso es porque a muchos no les conviene la
unión de los venezolanos, a otros simplemente no les interesa, y
algunos quizás esperan que todo pase solo. Pero ahí es cuando
pienso que uno mismo tiene que comenzar a hacer las cosas bien por su
cuenta: ya sea enseñando, culturizando, educando y/o creando
conciencia en todas las personas que podamos, especialmente en los
niños, ellos son el futuro de nuestro país, y de nuestro mundo
también.
Para concluir, les recomiendo ver el siguiente documental: El Lobo de los Cuentos. Trata precisamente sobre el tema de la discriminación, aunque no está directamente relacionado con la política. Es un documental realmente interesante, ¡échenle un vistazo!
El Lobo de los Cuentos.
